Que ver en Merzouga, Marruecos
Para empezar Merzouga se encuentra en un impresionante conjunto dunar, llamado Erg Chebbi, a 35 km. de Rissani, a 50 km. de Erfoud y a 130 km. de Errachidia.
Debido a la climatología se trata de una región con clima, y paisaje desérticos con desiertos de arena “erg” y de piedra “hamada”. Existiendo cauces de ríos secos sobre los que se suceden los oasis en los que están asentados los núcleos de población.
Esta población era originariamente nómada, hoy en gran parte asentada en las pequeñas poblaciones.
Por ello, el Erg Chebbi es el más accesible y por tanto el más conocido de los pequeños ergs.
Ocupa una parte de la cubeta topográfica situada entre el macizo de Taouz y la hamada (desierto rocoso).
Tiene unos 20 Km de largo y 4-5 Km de ancho, y algunas de sus dunas piramidales sobrepasan el centenar de metros de altura. Además, la arena de sus dunas posee la típica coloración anaranjada de las arenas saharianas y está compuesta casi exclusivamente por granos de cuarzo de tamaño muy similar.
Está situado al oeste junto al Valle bajo del Ziz, donde el río proveniente de la cordillera del Atlas es tragado por las arenas del desierto, ocasionalmente se producen inundaciones y lagunas.
Destacando en la época de lluvia (entre febrero y marzo), la laguna-presa Daya Tamda ( 31°5’23″N 4°3’6″W) a 3 km, al oeste donde abundan las aves, como el flamenco rosa.
Al norte de las dunas del Erg Chebbi está el pequeño lago Yasmina, un regalo de agua y vida a los pies de las dunas, muy solicitado por el turista, tiene una buena oferta de hoteles Vivac.
Como resultado, en esta zona encontramos cultivos de fruta temprana con destino al mercado local y exportación.
Al este se continua con la hamada pedregosa, que se extiende hacia Argelia.
Junto a las dunas, rodeados de palmeras, hay tres poblaciones turísticas.
En primer lugar hablámos de Hassi Labied, al este, que destaca por su palmeral, a 5 km.
A sur se encuentra Merzouga, que han crecido en los últimos años gracias al desarrollo de este tipo de turismo y a la agricultura.
Khemliya, a 6 km, al sur de la anterior.que se caracteriza por su antigua población del África negra.
Por ello, es uno de los puntos turísticos más importantes de Marruecos.
Khemliya Khamlia, (31°1’56″N 4°0’17″W) es un lugar muy atractivo por la majestuosidad de las dunas del Erg Chebbi, así como por su gente, cálida, amable y tranquila.
Debido a sus costumbres y sus tradiciones, y particularmente a su cultura musical ocupa un lugar único en todo el país, al ser habitado por negros provenientes de la África subsahariana, que practican el célebre folclore Gnawa.
Todavía podremos encontrar en temporadas, jaimas , donde viven los habitantes nómadas de la región.
A destacar la gran cantidad de fósiles de la región, un atractivo más que añadir.
Los fósiles pertenecen al Cretácico superior, unos 95 millones de años. Como consecuencia de la gran cantidad de vida animal que tenía la zona, se han encontrado restos de, dinosaurios, cocodrilos, tortugas y peces, en especial, muy interesante es el descubrimiento de uno de los más grandes dinosaurios carnívoro, el saharicus Carcharodontosaurus.
También su fauna es exótica, con aves en la zona de la laguna, reptiles como el lagarto de cola espinosa, el monitor, la víbora cornuda de las arenas y mamíferos como gerbos, erizos y zorros del desierto.
Además, otros atractivos son:
Su folclore típico sahariano-bereber y de música Gnawa. Cada vez más importante por su popularidad.
Celebrándose en verano el Festival de música internacional y el festival Sadaka en Khamlia, de música Gnawa.
Es sede de varios los eventos deportivos internacionales, como en automovilismo el Rallye Afriquia Merzouga, la carrera de bicicletas Titan Desert , raid con caballos el Gallops of Morroco, en carrera el Marathon de Merzouga y también, el clásico Marathon de Sables.
ALREDEDORES DE MERZOUGA
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Erfoud
En cuanto a Erfoud se encuentra a 50 Km. al norte por carretera o por una pista que cruza una hamada donde abundan los fósiles.
Es una pequeña ciudad moderna centro administrativo de la zona, a 802 metros de altitud y dominada por un cerro coronado por el Borj del este. Hoy en día tiene un importante mercado. Erfoud es una ciudad situada en un oasis del desierto del Sáhara, en la región de Draa-Tafilalet de Marruecos. Recomendamos visitar el carrier des fósiles y museo de fósiles.
Por ello, Erfoud es el epicentro mundial de la venta de fósiles, un sector en el que conviven coleccionistas privados y científicos. Hace 450 millones de años el desierto del Sáhara era un océano, y allí vivían trilobites, orthoceras, goniatites, cefalópodos, bivalvos y amplio etcétera, que se extinguieron hace cientos de millones de años; pero sus cuerpos fosilizados, permanecen bajo tierra y son codiciados tanto por coleccionistas, como por científicos de múltiples ramas de la Ciencia: arqueólogos, minerólogos, gemólogos,…
Por desgracia tras la Era Paleozóica, el océano del Sáhara se secó, pero debido a diferentes factores naturales, como la falta de oxígeno, los movimientos tectónicos y las altas temperaturas, los animales que lo habitaban permanecieron en el lecho marino, convertidos en fósiles con el paso de los años. En el área de Erfoud y Rissani, se han encontrado especies únicas en el mundo y, además, muchas de ellas poseen la especialidad de haber sido encontradas con los órganos y las partes blandas fosilizadas, lo que siempre ha atraído la atención de la comunidad científica internacional que únicamente ha realizado hallazgos similares en otros dos lugares del mundo: Canadá y China.
No obtante cada año en octubre se celebra el festival de los dátiles con numerosas manifestaciones llenas de colorido y tradición bereber.
También, desde esta ciudad salen las carreteras que siguiendo el palmeral del rio Rherís nos llevan a la ruta de las mil Kasbahs por Tineguir y las Gargantas del Todra, o por el palmeral del Ziz, para terminar en la capital provincial Errachidía.
Rissani
Por otra parte está Rissani, a 45 Km, es un importante palmeral fundado sobre la antigua ciudad de Sijilmassa, una de las bases de las antiguas caravanas que atravesaban el Sahara hacia Tombuctú, de la que todavía se pueden apreciar sus ruinas.
Lugar de nacimiento de la actual dinastía Alaoui, venerándose la tumba de su fundador Moulay el Cherif.
En la ciudad abundan los palmerales y las kasbas. Por suerte, sigue siendo un animado zoco dónde se pueden encontrar artesanía de la región, joyas del sur, objetos rústicos y gran variedad de fósiles.
Como resultado Marruecos posee numerosos monumentos de interés, su mayor patrimonio está vivo: su gente, su cultura, sus fiestas, …
Por lo tanto visitar Rissani un día que no sea martes, jueves o domingo implicaría no entender la esencia de esta ciudad y perder una oportunidad única. Es en esos días cuando conecta con su pasado al presentar su mercado, foco principal de los comerciantes de los alrededores.
Visitar los mercados de Rissani es algo en lo que fácilmente podremos emplear toda una mañana y que perdurará en nuestra memoria, debido a su experiencia multisensorial, ser el punto de encuentro de las personas de los alrededores y, sobre todo, gracias a su autenticidad y genuinidad.
Además, así podremos verlos en todo su apogeo y emplear la tarde en la vertiente monumental de Rissani, no sin antes realizar una parada para almorzar. Y para ello nada mejor que probar una pizza bereber, acudiendo a alguno de los pequeños restaurantes que se localizan en los alrededores del mercado. No será lo mismo que una cocinada bajo la arena, como mandan los cánones, pero tened por seguro que enriquecerá nuestro paladar marroquí.
Desde esta ciudad parte una carretera N-12, que cruza el Atlas Sahariano hacia Zagora y el valle del Draa.